De acuerdo con las declaraciones de algunos testigos y su misma madre, la joven de tan sólo 26 años de edad, se encontraba vendiendo calcetines y productos de belleza, cuando fue interceptada y detenida por elementos de la policía con las unidades 1092 y 1076, los cuales de forma violenta la sometieron indicando que se encontraba faltando a la ley.
A pesar de los esfuerzos de sus familiares para pedirles se les explicara en el momento y enseñara lo que cargaba en las bolsas la joven ahora detenida, los elementos policiacos decidieron ignorar todo a su alrededor y por medio de golpes se llevaron a la ahora acusada.
Hasta este momento, se ha privado incluso el derecho de que sea visitada por su familia, quienes aseguran también que se enteraron a sido torturada para que confiese un delito que no cometió y limpiar la falta de eficiencia del Estado.
En cuanto a la Policía del Estado, se limitado a mandar un comunicado en el que dice que estos hechos están en disposición del ministerio público, deslindándose de la responsabilidad de su dependencia y de sus elementos de seguridad:
“Se informa que está en proceso la puesta a disposición del Ministerio Público de una persona identificada como Leslie A., inicialmente por su presunta vinculación a delitos contra la salud. En cuanto los términos legales lo permitan, se brindará mayor información” se informa en el comunicado de la Secretaría de Seguridad.