El apoyo de los siete diputados del secesionista catalán Carles Puigdemont, gracias a un polémico acuerdo para amnistiar a los independentistas, fue clave para que Sánchez, al frente del gobierno desde 2018 tras ganar entonces una moción de censura, siga en el puesto cuatro años más.
Sánchez podrá formar un nuevo Gobierno en los próximos días con sus aliados de la coalición de extrema izquierda Sumar, poniendo fin a casi cuatro meses de bloqueo desde las elecciones legislativas del 23 de julio.
El presidente del Gobierno quedó segundo en esos comicios, por detrás de su rival conservador Alberto Núñez Feijóo, y en las últimas semanas ha tenido que negociar por doquier para sellar acuerdos con varios grupos regionalistas, cuyo apoyo está resultando crucial a falta de una mayoría clara en el Parlamento.
En concreto, ha tenido que mantener conversaciones con el partido Juntos por Cataluña de Puigdemont, que vive en Bélgica desde hace seis años para eludir su procesamiento por liderar el intento de secesión de Cataluña en 2017.
Aceptando, tras intensas negociaciones, apoyar la reelección de Sánchez, Puigdemont obtuvo de los socialistas el compromiso de la próxima aprobación de una ley de amnistía para cientos de independentistas procesados, que debería permitirle regresar a España.
Miles protestan por amnistía y regreso de Puigdemont
Miles de simpatizantes de la extrema derecha protestan desde hace días en la sede del Partido Socialista en Madrid, España, los cuales regularmente han acabado en disturbios. El miércoles por la noche, 15 personas fueron detenidas por alterar el orden público y enfrentarse a la policía, según la Delegación del Gobierno en Madrid.
Lo anterior, debido a una ley que podría permitir el regreso de Puigdemont y la cual acaba de ser registrada para su examen en el Congreso. Según Sánchez, la amnistía es necesaria para “cerrar las heridas” abiertas por la crisis de 2017 y para garantizar “la unidad de España por la vía del diálogo y del perdón”.
Sin embargo, es rechazada por la mayoría de los españoles, según varios sondeos de opinión. Esta amnistía llevó el domingo a cientos de miles de personas a salir a la calle en respuesta a una convocatoria del Partido Popular.
El sábado está prevista en Madrid una nueva manifestación, en la que participarán dirigentes del Partido Popular y del partido ultraderechista Vox.
Como consecuencia de estas tensiones, más de mil 600 policías se desplegaron de nuevo este jueves en torno al Congreso de los Diputados, completamente acordonado por las fuerzas del orden. Es el dispositivo equivalente a un partido de fútbol de alto riesgo.