Dicho contrato no sólo contempla la concesión por parte del Consejo de las unidades para su uso gratuito, sino también la realización del mantenimiento correspondiente, los servicios preventivos o correctivos, el equipamiento y balizaje.
En correspondencia, el Ayuntamiento designará a seis policías municipales para que operen las motocicletas en dos turnos de 12 por 36 horas, y abastecerá el combustible necesario para el despliegue de estos vehículos. Asimismo, garantizará la conectividad directa de la zona con la Dirección de Emergencias y Respuesta Inmediata (DERI).
Es así, como la suma de esfuerzos y la confianza entre sociedad y gobierno permiten ejecutar acciones coordinadas a favor de la proximidad policial y la prevención del delito en la Central de Abasto.