Por ello; inició una serie de denuncias contra el actual auditor, Francisco Romero Serrano, quien es acusado por supuestos delitos de violencia familiar y es obligado a renunciar al cargo, pues hasta donde se sabe tiene información en la que compromete al mismo Barbosa Huerta y subordinados como el mismo Gabriel Biestro, quien se ha postrado a la defensiva en sesiones que ha tenido con el actual auditor.
Según fuentes cercanas a esta redacción, mencionan que busca Barbosa Huerta una orden de aprehensión simplemente por represalia, ya que Francisco Romero mantiene el trabajo bajos las recomendaciones establecidas por la misma Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), ya que estas indicaciones podrían como dije en su momento exhibir los fraudes de Miguel Barbosa, el cual iniciaría una ola de escándalos y de ser investigado por la federación (el cual podría suceder, porque es odiado incluso por el mismo López Obrador por el mal manejo de Puebla e ir contra la corriente de izquierda) llegaría incluso a la prisión acompañando a políticos de su nivel Eukid N.
El personal que actualmente está en la ASE y el auditor saben mucho sobre toda la corrupción que hay en el Estado y en caso de que llegara Gabriel Biestro podría desaparecer todo, incluso se perdería la ideología morenista que peleó durante muchos años Andrés Manuel López Obrador, misma que fue votada por los poblanos para una mejora en el Estado y no para hundirlo más.
Lo preocupante, es que se ha visto que Barbosa Huerta es un tipo rencoroso que si algo no le gusta, no siguen sus indicaciones o le besan el pie, inicia una serie de persecución o silencia por medio de amenazas o denuncias a quien quiera exhibir toda su corrupción.