​En el corazón del Centro Histórico, una antigua casona es más que un monumento arquitectónico; es el ancla de una de las leyendas urbanas más escalofriantes de Puebla: la de La Nahuala. Esta historia, que combina terror y advertencia, ha sido transmitida por generaciones, arraigando lo sobrenatural a un sitio físico, la emblemática Casa del Alfeñique.

Cuenta la leyenda que constantemente aparece un niño escavando desesperadamente  diciendo que bajo las construcciones están los cadáveres de sus hermanos indígenas

Nadie se atrevía a entrar en la cueva del tiempo, pues se creía que en dichos pasajes habían ocurrido cosas terribles, asesinatos, robos y violaciones.

La emoción de ir a un parque de diversiones siempre es motivo de alegría, pero uno de los miedos más recurrentes es que el juego mecánico tenga un desperfecto y quedarse atorado en las alturas.