"Esta nueva etapa la vamos a iniciar sin perseguir a nadie, porque no apostamos al circo y a la simulación. Queremos regenerar de verdad la vida pública de México. Además, siendo honestos, si abrimos expedientes dejaríamos de limitarnos a buscar chivos expiatorios y tendríamos que empezar con los de mero arriba. No habría juzgados ni cárceles suficientes, pero lo más delicado es que meteríamos al país en una dinámica de fractura, conflicto y confrontación”.