El brote masivo de sarampión en Estados Unidos comenzó desde el pasado mes de octubre, provocando una emergencia sanitaria en abril y afectando en su mayoría a menores de 18 años.
El próximo jueves iniciará el año escolar en Nueva York, por lo que los barrios implicados como Brooklyn, el extremo oeste de Long Island, y más específicamente Williamsburg, sobre todo entre la comunidad judía ortodoxa, se ordenó la vacuna obligatoria para frenar el contagio de la enfermedad.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, emitió un comunicado señalando que "cuando las escuelas se preparan para reabrir esta semana, debemos permanecer vigilantes. Para proteger a nuestros niños y nuestros barrios”, por lo que llamó a todos los neoyorquinos a vacunarse.