El estudiante asesinado, del que no se proporcionó su edad, recibió un disparo durante el tiroteo en la escuela ubicada en el condado de Forsyth, Carolina del Norte, Estados Unidos; el alumno sospechoso del ataque se dio a la fuga, pero fue aprehendido después “sin incidentes”.

“La investigación está en curso. Fuerzas del orden y trabajadores de la secundaria trabajan para reunir a padres y estudiantes, además de que se contabiliza a la comunidad escolar”.

Tras un año de clases en línea por el coronavirus (COVID-19), las escuelas en Estados Unidos reviven temores a los tiroteos. Bajo ese peligro constante, el siniestro en Carolina del Norte es el segundo en una escuela de este estado, desde el comienzo de la semana.

Después de una búsqueda de cinco horas, la Policía de Carolina del Norte detuvo al otro estudiante y presunto autor material del tiroteo. Winston-Salem tiene 250 mil habitantes, y vive el último brote de violencia armada ya habitual en escuelas y campus universitarios de Estados Unidos.

Catrina Thompson añadió en mensajes a medios de comunicación que desconoce los motivos del tiroteo en la escuela de Carolina del Norte; defendió su derecho a reservarse la edad del estudiante asesinado y la identidad del detenido, quienes eran compañeros en la Mount Tabor High School.

El Departamento de Policía de Winston-Salem, en Carolina del Norte, emitió su pésame a través de Twitter para con la familia y seres queridos del estudiante asesinado tras el tiroteo: “Nuestros pensamientos y oraciones están con la familia hoy y en los días difíciles por venir”.