El agua tratada se utiliza principalmente en la limpieza de los trailers que transportan a los cerdos y en servicios sanitarios de los trabajadores, optimizando así los recursos disponibles y reduciendo el impacto ambiental. Estas prácticas no solo mejoran la eficiencia operativa, sino que también reflejan un enfoque consciente hacia la sostenibilidad.
Con estas medidas, Granjas Carroll de México reafirma su liderazgo en la industria porcina, demostrando que la integración de prácticas sostenibles puede ir de la mano con el éxito empresarial. La empresa continúa estableciendo un estándar en la industria al mostrar que el modelo de economía circular, la innovación y la responsabilidad ambiental pueden coexistir, beneficiando tanto a la empresa como al medio ambiente y a las comunidades.