A lo largo del fin de semana, las y los beneficiarios de esta experiencia pudieron disfrutar de las instalaciones de Mundo Imáyina que están adaptadas para que las y los niños con discapacidad disfruten cada actividad al máximo, que incluye juegos mecánicos, brincolines, parque acuático, áreas verdes y zonas de esparcimiento.
“Es un apapacho al alma, tanto a los papás como a los niños y niñas que viven esta experiencia, ya que salir de la rutina, de terapias, de su día a día y tener una experiencia donde te consienten y te divierten, es maravillosa la oportunidad”, explicó Pilar Villegas, coordinadora del CMERI, antes de la salida de las familias a Mundo Imáyina.