La gran mayoría de los pobladores de esta región, transitan por la vía pública a pie, en motocicletas, bicicletas o autos,así mismo los comercios, en su mayoría, estaban abiertos e incluso restaurantes, cafés y bares ofrecieron sus servicios.
El desacato al confinamiento voluntario y la sana distancia para evitar la propagación de la pandemia ha llegado a tal punto, que aunque el ayuntamiento impuso bandas para vedar el acceso al zócalo, los ciudadanos las rompieron y se colocaron vendedores ambulantes, boleadores de calzado y decenas de transeúntes.