Un macabro hallazgo aterrorizó la mañana de este lunes a los automovilistas que circulaban por la Autopista Durango-Mazatlán.
Entre los kilómetros 200 y 207 fueron localizados dos cuerpos sin vida, abandonados con un sello de brutalidad que apunta al crimen organizado.
Los restos estaban envueltos en cobijas y amarrados con cinta adhesiva, tirados a un costado de la carpeta asfáltica.
Elementos de la Guardia Nacional y Policía Estatal acordonaron la zona para el levantamiento de los despojos humanos.
Hasta el momento, la identidad y sexo de las víctimas son un misterio, y las autoridades de Sinaloa mantienen un hermético silencio sobre este doble asesinato.