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De docente malo a te extraños, deja la pandemia a padres de familia

Escrito por Henry Sánchez Ortiz

La pandemia a consecuencia del virus COVID-19, hizo que alrededor de un millón 600 mil alumnos reemplacen las tradicionales salas de clases por plataformas digitales para no perder el año escolar. Sin embargo; ¿será verdad que los docentes hayan bajado su ritmo de trabajo? O los padres de familia se quejan de lo mínimo que representa el hecho de ser docentes. Aquí nosotros te diremos que hace un docente con las famosas clases a distancia.

Para empezar, hay que señalar que así como los padres de familia se están adaptando a utilizar estas nuevas tecnologías, los docentes de igual forma tienen que adaptarse a algo que jamás habían utilizado, sobre todo los de nivel medio superior y obligatoria.

Problemas de conectividad de los estudiantes, la baja capacitación de los docentes para educar 100% online, la falta de entornos virtuales de aprendizaje son algunas de las problemáticas, que viven a diario miles de educadores en Puebla y que ha buscado resolver el primer webinar con cursos exprés a docentes que en lugar de apoyar terminan dando un aumento de trabajo, ya que si las clases regulares eran de 8:00 a 13:30 horas, ahora un docente termina su jornada laboral en casa a veces hasta la 01:00 de la madrugada.

Y es que además de intentar capacitar a los padres de familia de un tema que ellos aprenden al mismo tiempo, la carga de trabajo para mandar testigos, planes de trabajo que empaten con ahora las clases virtuales, deben atender a los padres que se niegan a apoyar a sus hijos ya que ellos "no estudiaron para eso".

Para muchos docentes esta nueva realidad representa un verdadero panorama cuesta arriba, dado que la gran mayoría no cuenta con competencias para una educación online eficiente. Si bien, muchos de ellos han debido introducir soportes tecnológicos en el desarrollo de sus clases, el aprendizaje 100% remoto no está arraigado aún en nuestra cultura educativa.

Por ello, si puedo señalar que la sobrecarga al docente se va a los límites gracias a la presión de la misma Secretaría de Educación Pública que quiere demostrar ante la sociedad que está trabajando y por los padres de familia que aún estando en confinamiento domiciliario, se les hace pesado apoyar y trabajar con sus hijos.

Mi pregunta para los padres que dicen que ser docente no es difícil, o mejor aún que dicen que sus hijos no son como los maestros indican que son ¿han sabido valorar el trabajo del docente en esta cuarentena? ¿Piensan que aún el trabajo docente es sencillo? Y del gobierno ¿que resultado pedirán a fin de ciclo escolar de una cultura jamás utilizada en este sistema educativo? Y ¿Qué tan agradecidos estarán con él trabajo docente que hacen día a día?

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