Para empezar les daremos una clase de como se arma una campaña negra tal vez el sirva también al gobernador para saber quienes en verdad los están atacando y deje de lanzar comentarios sin sentido que lo dejan en ridículo.

Las componen diversos elementos, según expertos. No suelen ser firmadas por sus creadores, sino que son elaboradas por equipos especializados, distintos a los responsables de las campañas convencionales o de propuestas, y deben ser impactantes y mover emociones, al tiempo que difunden información negativa sobre el personaje político en la mira, que por lo regular mantienen contactos cercanos con gente cercana a quien desean atacar, para tener información cercana, actual y verídica.

Dejando esta parte en claro, la campaña negra contra Barbosa Huerta viene desde su propia gente interna o cercana a él, empezando por su gente que lo asesora o coordina, quien trabaja sus redes sociales, fotografía incluso la que lleva los "convenios" con los medios de comunicación, recuerden (mayor número de enemigos=a mayor número de ataques).

El trabajo de buscar a los verdaderos responsables de sus campañas negras es su misma gente que le paga en ese departamento de Comunicación, que se ve unicamente están ahí para cobrar y no para cuidar la imagen de quien les da de comer.

Y digo son ellos, porque deben analizar el contexto de done sale o proviene toda esta enredada (jajaja) campaña negra, para dárselo a conocer al gobernador, ayudarlo a hacer un buen discurso para que deje de hacer el ridículo en cada rueda de prensa.

Pero bueno, seré simple esta primer clase es totalmente gratis. Si estiman un poco a quien les da de comer habrán llegado a este punto de mi redacción, y si tienen alguna duda saben donde buscarme.

El regalo: La cuenta en twitter y facebook, denominado desgobierno de Puebla, no fue creado por un partido político ni mucho menos por un político, al menos que sean tan codos y sean de verdad muy pésimos para uso de redes sociales, que no puedan invertir 10 mil pesos de publicidad para aumentar el ridículo número de seguidores en redes sociales.