A sido tan grande su ambición que destituyó a Guillermo Arechiga de la Secretaría de Movilidad y Transportes, para darle el cargo a Elsa Bracamonte quien es hermana del intelectual saboteador de Morena, Mario Bracamonte, quien además busca apoderarse de la dirigencía estatal.
Barbosa Huerta demuestra una vez más que es un político a quien no le importa acusar a sus ex secretarios de corrupción con tal de ofrecerles los cargos a quienes en verdad le muestren fidelidad para seguir en el poder. Se nota lo poco que le ha bastado el poder de la gubernatura por lo que quiere apoderarse del partido de Morena y poner a sus súbditos a saquear el estado, personas fieles a el como lo son Gabriel Biestro e incluso Vianey García, ambos diputados del Congreso local.
Su coraje al partido surgió cuando le ofrecieron la candidatura a Claudia Rivera Vivanco, una militante que ha sido fiel a los intereses del partido y sigue cabalmente la ideología López-Obradorista, pues ha sido ella quien se opuso a formar parte del régimen de Barbosa quien ha querido apoderarse de la capital Poblana y por ello quiere imponer con agresividad y secuestro del partido a Biestro y seguidores.