La víctima, un hombre de apenas 25 años, fue atacado sin piedad a plena luz del día en lo que las autoridades ya perfilan como un escalofriante ajuste de cuentas. El cuerpo quedó tendido en el pavimento, dejando una imagen dantesca.
Testigos del horrible crimen relataron que el joven se encontraba discutiendo acaloradamente con otro sujeto en la esquina de la 18 Norte y 2 Oriente. En un instante de furia descontrolada, el agresor sacó un arma blanca y se abalanzó sobre la víctima, asestándole múltiples y certeras puñaladas directamente en el pecho, un ataque con una saña inexplicable.
Tras dejar al hombre desangrándose, el asesino huyó desapareciendo entre el gentío que observaba aterrado.
A pesar de la rápida llegada de paramédicos y un fuerte despliegue de la Policía Municipal, Estatal y la Guardia Nacional, fue demasiado tarde. Solo pudieron confirmar lo inevitable: la muerte del joven. La zona fue acordonada como si fuera una película de horror mientras personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) se encargó del macabro levantamiento del cuerpo, que fue llevado al Semefo como N.N., pues su identidad sigue siendo un misterio. Las autoridades han abierto una carpeta de investigación en busca del homicida, mientras el miedo se apodera de las calles de Puebla.