Como representante del movimiento de Cuarta Transformación en México, Alejandro Armenta, al ser presidente del Senado de la República se caracterizó por el firme compromiso de la defensa de los recursos estratégicos y los principios de justicia social, promovidos por el expresidente, Andrés Manuel López Obrador, impulsó la nacionalización del litio, recurso invaluable para el futuro económico de nuestro país, con el fin de frenar intereses extranjeros y reforzando el objetivo de un país soberano y en control de sus riquezas naturales, siempre en beneficio del pueblo.
Armenta ha sido también una voz crítica y constante en contra de la corrupción y el abuso de poder; como senador de Morena enfrentó una situación con la entonces presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, ya que, en mayo de 2023, Armenta denunció haber recibido mensajes "intimidantes" provenientes de Piña; por ello solicitó transparencia en las relaciones entre el Poder Judicial y el Senado. Este acto de valentía evidenció las tensiones entre ambos poderes y resaltó el papel de Alejandro Armenta en la defensa de los principios de "no mentir, no robar y no traicionar", que sustentan al movimiento de Cuarta Transformación.
Durante la ceremonia de la Conmemoración del Día de la Constitución, en su discurso del 5 de febrero de 2023, Armenta reiteró su visión por una Reforma Judicial que respondiera a las necesidades del pueblo mexicano. Desde la histórica Casa de Xicoténcatl, sede del Senado, abogó por un Poder Judicial más accesible y comprometido con la justicia social, cuestionando los privilegios de algunos funcionarios y proponiendo una elección popular de jueces y magistrados para garantizar que sirvan al pueblo. Su convicción por transformar el sistema de justicia refleja el espíritu de cambio estructural que define a la Cuarta Transformación.
Armenta ha demostrado en repetidas ocasiones su disposición a enfrentar desafíos en favor de México, destacándose en confrontaciones con la senadora Xóchitl Gálvez y otros miembros de la oposición cuando ha sido necesario. En cada instancia, su compromiso con los ciudadanos y su rol como uno de los pilares fundamentales de la Cuarta Transformación, subrayan su inquebrantable convicción de que los recursos de México y el poder judicial deben permanecer al servicio del pueblo, promoviendo siempre un cambio profundo y duradero para la nación.