Fue en 2016 en el hotel Marriot, antes Mesón del Ángel. Iba él con una acompañante y me extrañó verlos porque la convocatoria era para reporteros a una rueda de prensa sobre la herencia a la familia Jenkins de Landa y la disputa de 780 millones de dólares que aún no se sabe dónde quedaron.
La cobertura fue escasa, pues en las redacciones prácticamente se prohibió abordar el espinoso asunto del que se adueñó el morenovallismo por órdenes de Rafael Moreno Valle Rosas, al mismo tiempo de operar la candidatura al gobierno estatal de Antonio Gali Fayad.
La rueda de prensa terminó solamente con la presencia del abogado Carlos Serna; Guadalupe Mayorga, operadora de comunicación de Guillermo de Landa; Francisco Romero Serrano, su acompañante y el que esto escribe.
Después de unos minutos de silencio, Romero Serrano le pidió a Carlos Serna hablar a solas. Entendí y le dije que saldría a desayunar al restaurante del hotel, pero que regresaría. Y así fue, luego de que Lupita Mayorga me avisó que ya se habían ido.
¿Qué pasó, abogado?, fue mi pregunta.
“Este señor, Francisco Romero Serrano me pidió 5 millones de pesos para involucrarse, junto con su acompañante, en una campaña que desprestigiará al candidato del PAN, Antonio Gali Fayad, que es apoyado por Moreno Valle para sucederlo en la gubernatura, de tal forma que pueda ganar la del PRI, Blanca Alcalá. Por supuesto que no acepté, es un vil chantaje”.
Fue la respuesta de Carlos Serna, quien todavía vive, al igual que Lupita Mayorga.
Tiempo después, Romero Serrano se convirtió en el contador del periódico Cambio, merced a su amistad con el extorsionador Arturo Rueda Sánchez y sus socios.
Igualmente, fue Cambio el que impulsó a Romero Serrano rumbo a la ASE, aprovechando su buena relación con Miguel Barbosa, no obstante haber sido su fiero detractor al igual que Mario Alberto Mejía Martínez, asunto que ventiló públicamente el propio gobernador Barbosa Huerta durante una entrevista en Casa Aguayo.
Ya instalado en la Auditoría Superior del Estado, Francisco Romero fue señalado de chantajear a presidentes municipales a cambio de limpiar toda mancha de sus cuentas públicas; de favorecer a medios de comunicación paleros con convenios publicitarios.
El 31 de marzo de 2022, ya con denuncias por violencia familiar y realizar operaciones con recursos de procedencia ilícita, Romero Serrano fue aprehendido y encarcelado.
¿En qué momento se distanció de Barbosa, al que elogió hasta el cansancio y ahora lo califica de lo peor y de haber gobernado con los intestinos?
SOBRE EL MUERTO LAS CORONAS
¡Ah, los periodistas “impolutos”!
Su trabajo de pegar para cobrar lo enriquecen redimiendo a políticos y empresarios de dudosa calidad moral.
Ejemplo reciente es el priista Néstor Camarillo, el falso candidato “indígena” que nada en millones.
Hace unas horas colocaron en un pedestal al ex auditor del estado, Francisco Romero Serrano, quien fue presidente del COE y SINDEMEX, organismos utilizados para ensalzar al poder a cambio de posiciones dentro del gobierno. Por eso llegó a la ASE.
En una entrevista a modo, Romero Serrano arremete contra un muerto y él se purifica jurando que dice la verdad que plasmará en un libro.
Lo mismo hace con Rosario Orozco Caballero, a la que besaba la mano; con Carlos Palafox Galeana, al que rendía pleitesía; con Gabriel Biestro, al que consideraba en 2019 un gran líder cameral que merecía la gubernatura interina, cambiando ahora su percepción al tacharlo de limpia botas, inepto, ignorante y oportunista.
Si Romero Serrano asegura que el pleito con Miguel Barbosa fue por negarse a atacar a Claudia Rivero Vivanco y no detener una observación al DIF estatal, ¿por qué no lo dio a conocer a la opinión pública y renunció a la ASE para proteger su pulcra integridad?
Si Romero Serrano desprecia la corrupción e impunidad, ¿por qué aceptó trabajar con el periódico Cambio y asociarse con su dueño Arturo Rueda Sánchez, actualmente preso por extorsión comprobada, caso que explotó en 2015?
Sus entrevistadores no le preguntaron ¿por qué le pagaba a su sastre para que le colocara en sus trajes forros con escenas de la película “El Padrino”?
¿Cómo le hizo para pagar en efectivo y por adelantado un año de renta de su casa en el exclusivo fraccionamiento “La Vista”?
Tampoco lo cuestionaron sobre sus apreturas económicas antes de asumir la titularidad de la ASE, pero al llegar, ¿cómo liquidó en un par de meses sus deudas bancarias por saturar sus tarjetas de crédito?
Mucho menos habló de la extorsión a ediles que se quejaron por pagar moches para desaparecer observaciones de sus cuentas públicas.
Quienes lo conocen, dicen que Francisco Romero Serrano se quitó los cuernos infernales y se colocó una aureola, en una demostración de que sabe ponerse el disfraz justo en momentos difíciles.
No le importa a Paco, como le dicen sus amigos periodistas que intentarán limpiarlo e impulsarlo a nuevas aventuras. Es la misma estrategia que utilizó con su ídolo Arturo Rueda Sánchez.
Dios los cría…
POSDATA: Hace algunos ayeres, me extrañó ver desayunando e Francisco Romero Serrano y Rodrigo Abdala. La cortesía obligó el saludo. Eligieron “La Casa de los Muñecos” del Complejo Cultura Universitario. La oscura fama del primero no era recomendable; sin embargo, el segundo aceptó la invitación.
Romero buscaba afanoso ingresar a las filas morenistas, no obstante haber estado ligado al PRIAN.
Lo logró.
Solo Rodrigo Abdala sabe los acuerdos que sellaron.
POSDATA 2: Si Francisco Romero Serrano está limpio de todo y por todo, entonces que lo indemnicen con una suma millonaria y le ofrezcan disculpas públicas.
Eukid Castañón Herrera debería exigir lo mismo.
Arturo Rueda está pensándolo para cuando quede en libertad.
Y los que faltan por las injusticias cometidas.
Ver para creer.