En este lugar unas personas entran a robar ganado, y que para lograr esto se convierten en perros o coyotes para no ser descubiertos.
Si llegan a ser descubiertos, entonces se convierten en guajolotes o cerdos para así pasar desapercibidos.
Los animales no son extraídos de los corrales, ya que por las mañanas se encuentran sus cadáveres con la misma herida en el cuello y sin sangre.
Los cuerpos son quemados porque nadie quiere alimentarse de ellos, ni siquiera los perros. Mucha gente cree que estos sucesos fueron realizados por los "Nahuales".