El verdadero rostro detrás de Lilia Cedillo y la incapacidad de atender al sector estudiantil

Escrito por Henry Sánchez Ortiz

“No hay manos detrás de un movimiento estudiantil”, hay hartazgo a la falta de solidaridad, empatía y encubrimiento de acosadores dentro de la BUAP por parte de la rectora Lilia Cedillo.

No es nuevo que los y las alumnas desde la llegada de Lilia Cedillo no han estado conformes, en primer lugar, porque fue impuesta por el ex rector José Alfonso Esparza Ortiz, quien le otorgó este lugar para que cubriera todas las anomalías y desfalcos que realizó durante su administración, así como seguir llevando el mando de la universidad, tras la imagen de Lilia Cedillo.

Por eso, no es difícil entender que sigan encubriendo a docentes acosadores, que curiosamente son familiares o amigos cercanos de Lilia Cedillo y del mismo Alfonso Esparza.

Hace poco expulsaron de la facultad de Música a una joven que acusó a un profesor de acoso y ocho estudiantes que trataron de defenderla, sólo porque pertenece a la lista de intocables.

Para Lilia Cedillo los temas de acoso sexual, cumplimiento de docentes al impartir clases, prácticas profesiones, temas de primer nivel de interés de los estudiantes, no son prioritarios como lo es cubrir el desfalco de Alfonso Esparza de un desvío de 470 mdp del presupuesto universitario al equipo de Lobos BUAP, equipo que compró su hija Luza Esparza, delito que fue dado a conocer por el ex titular de la ASE, Francisco Romero Serrano, como supuestos desvíos de recursos públicos en poder de la BUAP, mediante el uso de empresas ‘factureras’ fantasmas.

Podríamos hablar todo el día de cada uno de los favores que debe cumplir Lilia Cedillo a Esparza, favores que le pueden costar la reelección a la rectoría, aunque a estas alturas parece que a ella nada le importa seguir al frente de la máxima Casa de Estudios.

Lo que si es lamentable es que, a pesar de la llegada de una mujer a la BUAP, se creyó ayudaría en realidad a las mujeres estudiantes en el tema de acoso sexual, sin embargo; todo a sido en vano, ya que los acosos continúan ascendiendo y esta movilización es parte de ese hartazgo de abandono.

Los y las alumnas de la BUAP no sólo deben ser escuchados, porque siempre ha sido así para terminar con los paros estudiantiles, se deben cumplir las promesas, actuar y decirles a los jóvenes que ya no tienen peligro alguno y que docentes acosadores como lo son: Alberto Carrillo, Alan Villanueva Huerta, Luis Enrique López de la Rosa, Libni morales Lorenzana, Toxqui Tlaxcalteca Moctezuma de Jesús, Arturo Gracia Verónica entre otros docentes de diversas facultades que ya han sido denunciados y docentes de prepas incorporadas a la BUAP, ya no laborarán más en la institución, sin lo anterior, las y los alumnos no deberían rendirse hasta que sus peticiones sean cumplidas.

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